la letra sin sangre entra

Blog de libros y literatura escrito por Francisco Herrera

27 abril 2005

 

Poesía nutritiva

Repasando notas que tomé hace tiempo me encuentro con una de esas definiciones redondas con las que José Ángel Valente acostumbraba a regalarnos: Todo el que se haya acercado, por vía de experiencia, a la palabra poética en su sustancial interioridad sabe que ha tenido que reproducir en él la fulgurante encarnación de la palabra. No ha oído ni leído. Ha sido nutrido. Se ha sentado a una mesa. Ha compartido, en rigor, un alimento (Variaciones sobre el pájaro y la red, precedido de La piedra y el centro). De Valente me quedo con esa corporeidad, ese empeño por llevar los conceptos poéticos a lo material, a pesar de su carga conscientemente mística.





<< Inicio

Archivos

abril 2004   mayo 2004   junio 2004   julio 2004   agosto 2004   septiembre 2004   octubre 2004   noviembre 2004   diciembre 2004   enero 2005   febrero 2005   marzo 2005   abril 2005   mayo 2005   junio 2005   julio 2005   agosto 2005   septiembre 2005   octubre 2005   noviembre 2005   diciembre 2005   enero 2006   febrero 2006   marzo 2006   abril 2006   mayo 2006   junio 2006   julio 2006   agosto 2006   septiembre 2006  

This page is powered by Blogger. Isn't yours?

Suscribirse a Entradas [Atom]