Si hay algo que está claro es que las revistas literarias españolas se encuentran en un momento decisivo como género, con propuestas actuales y con la consolidación de proyectos ya maduros.
Letras libres en su número de junio ofrece una charla con el editor de
Eñe, Alberto Anaut. En un momento dado la entrevistadora establece una amorosa comparación entre esta revista y el
Granta en español. Por supuesto que el afectado defiende su propuesta como más exquisita, pero hace todo lo posible por no entrar al trapo.
En cualquier caso, el lector propicio sólo tiene que cotejar los párrafos definitorios de ambas propuestas editoriales. La primera dice:
Eñe sabe que existen muchas respuestas, pero la más cercana, silenciosa y verdadera es la de los libros. La segunda dispara (en letra minúscula casi de contrato de telecomunicaciones):
Granta casi nunca publica, aunque su calidad sea incuestionable, ensayos académicos y ensayos sobre escritores; ni reseñas; ni tampoco reportajes o crónicas cuyo interés primordial sea inmediato o circunstancial; ni ciencia ficción o narrativa romántica, fantástica, histórica y policíaca; poesía; así como tampoco crónicas de viajes que carezcan de intención narrativa. ¿Qué quieren que les diga? La persona que incluyó lo de “casi” merece el reconocimiento de la posteridad.